24 de agosto de 2010

El Submarino amarillo

Como todo en la vida, el Club Ciclista Berritxaco tuvo su origen. Si bien el Berritxaco se fundó en el 2004, las bases del club son anteriores y se remontan a la época del Club Ciclista Caparroso y su submarino, como se ha conocido durante años a la escuela de ciclismo de esta localidad de la Ribera de Navarra y que actualmente se sigue denominando así al equipo cadete, aunque cada vez con menos fuerza.
El Club Ciclista Caparroso se fundó en el año 1996, siendo uno de los ciclistas de la plantilla de escuelas el actual presidente del Berritxaco. El club fue creciendo hasta que en el año 2003 se decide sacar un nuevo club ciclista dentro del organigrama del Club Multideporte Peralta. En este nuevo club se estructuraron 3 categorías (cadetes, juveniles y féminas), la idea del proyecto era buena, pero su puesta en marcha no lo fue tanto por lo que la parte del equipo de féminas decidió separarse y fundar un nuevo club en el que poder albergar el equipo femenino. De esta manera nació en el año 2004 el Club Ciclista Berritxaco, gracias al esfuerzo de las ciclistas de aquellos años y al apoyo de sus padres. Este capitulo de la historia lo contaremos otro día.
Volviendo a la historia del submarino amarillo y a aquella epoca del Club Ciclista Caparroso, decir que Caparroso es un pueblo de unos 2.500 habitantes donde llego a contar con unas 50 licencias de ciclismo en sus mejores años, los cuales coincidieron con los inicios como director de Iosu Costa (el que escribe). En el año anterior a la división el club contaba con 25 críos en escuelas, un equipo cadete, uno juvenil y el femenino, a lo que hay que sumar los cicloturistas del pueblo.
En aquel último año los equipos de escuelas lograron gran cantidad de triunfos y pódiums, lo que les valió para vencer en los Juegos Deportivos de Navarra en las categorías de principiantes y alevines.
De aquellos ciclistas relacionados con el C. C. Caparroso algunos ya han ido dejando el ciclismo, mientras que algunos otros aun siguen e incluso consiguiendo buenos palmares. Cada uno ha ido escribiendo su historia en el ciclismo.
Entre los ciclistas que han ido dejando el ciclismo durante estos años se encuentran Marcos Abaurrea (con el que conseguí una medalla de bronce en un campeonato de Euskadi de americana elite), Ignacio Camino, los hermanos Sanz (Oscar y Diego que corrieron hasta aficionados), mi hermano Xabier Costa (que ahora suele colaborar con nuestro equipo), Miguel Garcia, Xabier Luki, Jesús Pereda y algunos más. Algo más jovenes Carlos Melero o Oscar Goitiandia (su primo ahora corre en cadetes).
Por otro lado hay corredores que aun siguen compitiendo, como es el caso de Javier Iriarte, que compite en aficionados trás haber estado un año en profesionales en el equipo continental Burgos. El mayor de la saga de los Martinez de Morentin, ya que Raul compite en aficionados y tiene a los dos hermanos en categorías inferiores. Ya en juveniles podemos encontrar a David Luki o Javier Valencia (ambos han disputados varios campeonatos en los últimos años). Más jóvenes son los cadetes que aun quedan de aquella escuela que aun perdura y que este año ha sacado equipo de cadetes donde militan Gonzalo Iriso (reciente Campeon de España de scracht), Luís Pascual, Adrian Galindo (su hermano Asier que ya corría en aquellos años aun está en escuelas) y Jorge (el pequeño de los Martinez de Morentin).
Ese es el primer resumen del Submarino Amarillo, digo el primero porque los ciclistas que aun siguen tienen un buen camino por delante. Y digo el primero porque en los archivos del Berritxaco guardo los planos de montaje del submarino, que algún año de estos los sacaré de nuevo para crear una nueva escuela de ciclismo. Y es que aquellos años de mis comienzos como director (a las primeras carreras me tenían que llevar los padres de los ciclistas porque aun no tenía edad para conducir) y como organizador son diferentes al trabajo de hoy en día.
De momento seguiremos trabajando por el ciclismo femenino y de pista, pero seguiré guardando esos planos para en un futuro no tan lejano añadamos un submarino a la flota del Berritxaco.